jueves, 12 de diciembre de 2013

HA PARTIDO JOSEFINA ERNST


  
                  Este sábado siete de diciembre, a los noventa y dos años de edad,  dejó de existir en Caracas Josefina Ernst, pionera en las luchas por los derechos de la mujer y por el establecimiento de una Venezuela democrática.

            En pleno desarrollo de la Segunda Guerra Mundial se constituye en Caracas la Agrupación Cultural Femenina (ACF) cuyo objetivo esencial era la convocatoria a un Congreso de Mujeres. A la vez, en Venezuela se vive un período de efervescencia política luego de las tinieblas de la dictadura gomecista. Durante el proceso de elección de concejales y de diputados a las Asambleas Legislativas  en el Distrito Federal y en algunos Estados, las mujeres deciden lanzarse a la calle para incitar al voto a la población masculina, pues las mujeres carecen de tal derecho. Ello no es óbice para que se integren a las luchas, ya como militantes de los partidos de avanzada, ya como independientes. En esta actividad estuvo Josefina en primera fila con otras coétaneas o que le aventajaban en edad: Ana Senior, Josefina Juliac, Carmen Clemente Travieso, Ana Luisa Llovera, Eumelia Hernández, Carmen López Obediente, Mercedes Fermín, María Teresa Castillo, Antonia Palacios, Mercedes Lobatón,  Alida de Planchart y muchas otras, sin desligarse de la participación masculina, entre quienes Josefina siempre recordó a Salvador de la Plaza, Rodolfo Quintero, Ricardo Martínez, Miguel Moreno, Germán Tortosa, José Antonio Mayobre.

   Josefina Ernst fue designada como representante al Congreso de la Juventud por la Victoria, celebrado en México, donde se abogó por el fin de la guerra. A su retorno al país, participó con las demás integrantes de la ACF en ciclos de charlas sobre temas sociales, políticos y literarios. Con Carmen Clemente Travieso asumió la responsabilidad de publicar una página semanal no exclusivamente de temas femeninos, sino con variadas colaboraciones, en el diario AHORA y posteriormente en Últimas Noticias, dirigido por Kotepa Delgado, y en El Nacional.            

Al evocar aquellos tiempos en un bosquejo autobiográfico escrito hace pocos años, Josefina Ernst sentenció: “Yo asistí como representante de Venezuela al Congreso Continental de la Juventud por la Victoria celebrado en Méjico en plena guerra, al que asistieron representantes de todos los países de América, incluyendo los Estados Unidos. Y a tantos años de aquellos acontecimientos, nuestros enemigos de hoy no son otros que los democráticos Estados Unidos de América”.

    Así, sin cortapisas y sin ataduras Josefina  Ernst deja un ejemplo de firmeza a las nuevas generaciones.

   Aparte de su labor como traductora de inglés, fue Josefina una acuciosa lectora y en los últimos años de su vida propuso la creación de una biblioteca circulante que llevó su nombre por sugerencia de sus compañeros y de su esposo, el fallecido humorista Aureliano González.

            Extrañaremos su alegría y su transparencia vital.